Los vientos del Cercano Oriente y las Revoluciones por Venir
The forces which have been unleashed in recent weeks threatens to upend many, if not most of the old relationships and understandings that formed the basis of U.S. Mid-East policy.
Las fuerzas que sacuden varios países de Africa del Norte y del Golfo Pérsico fueron contenidas por generaciones por gobiernos represivos y despiadados, muchos de los cuales han sido aliados incondicionales de Estados Unidos. Las fuerzas desatadas en las recientes semanas amenazan con cambiar muchas de las viejas relaciones y entendimientos, (si no la mayoría de ellas), que formaban las bases de lo que es la política norteamericana para el Medio Este.
as Revoluciones por Venir
26/2/2011 - Mumía Abú-Jamal
Mientras los fuegos de rebelión y resistencia se encienden en antiguas ciudades árabes, expertos norteamericanos (especialmente los de la variedad derechista) nos advierten de catástrofes urgentes: altos precios de la gasolina, y la idea que aterroriza en proporciones casi histéricas -- los islamistas!
Pero hay algo curioso sobre rebeliones y revoluciones: pueden empezar en una forma, pero nadie -Nadie!- sabe donde van a parar. Esa es la naturaleza de las revoluciones!
Parece que las voces de la clase de los expertos norteamericanos aparentemente han olvidado que los Fundadores de Estados Unidos, a quienes ellos gustan reverenciar y elogiar como los Profetas de la Libertad, fueron --vamos a decirlo--, revolucionarios que desafiaron (con un poco de ayuda y dinero de los franceses), al imperio más poderoso de su tiempo --el imperio británico.
La mera idea de tener una nación sin un rey era... revolucionaria. Es por éso que cuando Francia tuvo su revolución, años después de la revolución norteamericana, las coronas de Europa se juntaron (en verdad, conspiraron!) para derrotar la revolución francesa y hacerla polvo. Porque, en esos días, era común creer que los reyes y las reinas gobernaban por la voluntad de Dios: es la teoría de el derecho divino de los reyes.
Las revoluciones norteamericana, francesa y haitiana atacaron diréctamente esa teoría.
Abraham Lincoln, cuando era miembro del Congreso norteamericano, en 1848, dijo a sus compañeros congresistas: "Es una cualidad de las revoluciones no seguir ni las viejas formas de hacer las cosas, ni las viejas leyes; sino quebrar las viejas formas y las viejas leyes; y hacer nuevas formas y nuevas leyes."
Las fuerzas que están causando estragos en varios países de Africa del Norte y del Golfo Pérsico fueron contenidas por generaciones por poderosos gobiernos represivos y despiadados, muchos de los cuales han sido aliados incondicionales de Estados Unidos. Las fuerzas desatadas en las recientes semanas amenazan con cambiar muchas de las viejas relaciones y entendimientos, (si no la mayoría de ellas), que formaban las bases de lo que es la política norteamericana para el Medio Este.
Increíble! Ninguno de los "expertos" en la región, pocos académicos, y virtualmente ni una de las cabezas parlantes del cable y la televisión tuvo la menor idea de lo que iba a pasar, hasta que las compuertas se fueron abajo y la hirviente furia lo arrasó todo.
No tenemos una idea cuando ni donde esas fuerzas se van a disipar. Pueden irradiar por años. En verdad, esas fuerzas pueden infiltrarse en otras partes del mundo.
Esa es también la naturaleza de la revolución.
libertad-mumia.blogspot.com/2009_01_01_archiv...
Revolutions to Come
[col. writ. 2/26/11] (c) '11 Mumia Abu-Jamal
As fires of rebellion and resistance flash through ancient Arab cities, the nations' pundits (especially those of the rightish variety) warn us of impending doom, in the form of rising gas prices, and the bugaboo of near-hysterical proportions -- Islamists.
But there's a funny thing about rebellions and revolutions. They may begin one way, but no one - No One - knows where they will end. That's the nature of revolutions!
The voices of America's pundit class have apparently forgotten that the Founders that they like to revere and praise as Prophets of Freedom, were -- well, revolutionaries, who stood against the most powerful empire of the age -- the British (with a little help and money from the French)
The very notion of having a nation without a king was, well -- a revolutionary idea. That's why, when France had its revolution a few years later, the crowned heads of Europe got together (conspired, really) to beat them into the ground. For, back in those days, the conventional wisdom was that kings and queens ruled by the will of God; hence, the divine right of kings.
The American, French, and Haitian Revolutions put a real dent into such notions.
Abe Lincoln, speaking as a Congressman in 1848, told his fellow members: "It is a quality of revolutions not to go by old lines and old laws; but to break up both, and make new ones."
The forces roiling today in several North African and Persian Gulf countries have been held in check for generations by powerful, repressive and ruthless governments, many of whom have been staunch U.S. allies. The forces which have been unleashed in recent weeks threatens to upend many, if not most of the old relationships and understandings that formed the basis of U.S. Mid-East policy.
Remarkably, none of the 'experts' on the region, few of the scholars, and virtually none of the talking heads on TV and cable had a clue, until the dam broke and the boiling rage burst forth.
We have no idea when our where these forces will dissipate. They may radiate for years. They may, indeed, spill out into other areas of the world.
That too, is the nature of revolution.
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