El tribunal de Budapest absolvió este lunes a Sandor Kepiro, considerado uno de los últimos criminales de la guerra nazi, acusado de complicidad en crímenes de guerra en Serbia en 1942 contra los judíos.

Según el diario El Mundo, la fiscalía había exigido cadena perpetua pero la defensa pedía la anulación del proceso o la absolución:

El presidente del tribunal, el juez Bela Varga, ha anunciado el veredicto, el cual se podrá prolongar hasta el próximo martes.

Sandor Kepiro estaba acusado de complicidad en crímenes de guerra cometidos tras una ofensiva entre el 21 y el 23 de enero de 1942 en Novi Sad, territorio de la actual Serbia, que en aquel entonces formaba parte de Hungría, aliado de la Alemania nazi. Al menos 1.200 civiles -judíos y serbios- fallecieron tras la masacre.

Tras el proceso, varios historiadores han explicado que los documentos en los que se basaba la fiscalía eran incompletos y estaban mal traducidos.

El centro Simon Wiesenthal marcó a Sandor Kepiro como uno de los nazis más buscados en la actualidad.

En 1944, Sandor Kepiro fue condenado a 10 años de cárcel por un tribunal militar, pero la decisión fue anulada por las autoridades de la época. En 1946, fue condenado por rebeldía a 14 años de prisión por un tribunal comunista.

Sandor Kepiro nunca cumplió su pena: huyó a Argentina donde se escondió durante 50 años antes de regresar en 1996 a su patria