Le es común escuchar  estos comentarios en las calles, en el colegio, trabajo, en  casa,  o simplemente no las escuche, sino que usted mismo las diga:

“Yo me casaré son ella y  mi mujer tendrá que servirme en lo que yo desea,  en la casa mandaré yo,  porque no quiero que me digan “pisado”

“No soy machista, pero las mujeres deben de saber cuál su lugar”

“¿Maricón ,yo? Nada que ver,  soy un machazo”

“Rosa, ¿por qué te vas tan temprano a tu casa?  -  Es que si llego tarde mi “marido” pensará mal y  terminará con pegarme delante de mis hijos” -  “Con qué cara las esas mujeres  denuncian al violador, si ellas mismas tienen la culpa al vestirse con minifaldas o prendas cortas”

“Si un varón tuvo varias parejas es un “¡maestro!”, pero si una mujer está con varios varones es una “cualquiera”“

“Las mujeres sólo sirven para cocinar , lavar, o sea ser ama de casa”

¿Te dio risa o indignación esos comentarios? , si optaste por lo primero  debes preocuparte, o talvés no te dio risa , ni indignación, y lo ves como algo normal que pasa y debe pasar en nuestra sociedad,  eso también es preocupante; como si ya  la sociedad peruana estuviese adaptada para un machismo en el pleno siglo XXI.

Sabía s que una de las grandes barreras de evolución como sociedad en el Perú, no es posible construir una sociedad democrática, tolerante y respetuosa si no se combate el flagelo de la violencia doméstica.

Te damos unas cifras alarmantes:

Sólo de enero a agosto se han registrado 5,286 delitos de violación sexual solo en    Lima Metropolitana y el Callao. Esto quiere decir que se han registrado más violaciones que robos.(Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público)

Solo el 26,8% de las mujeres maltratadas denuncia.(Encuesta Endes 2010)

En el Perú más de 120 mujeres mueren al año por violencia machista.

Los datos de ONU-Mujeres, estiman que 6 de cada 10 mujeres han sido víctimas de violencia física o sexual en el transcurso de sus vidas.

“La peor desigualdad entre los hombres y las mujeres es que nosotras vivimos con miedo: con miedo a que nos violen en el taxi, a que nos acosen, a que nos peguen. Miedo a que no nos alcance la fuerza para defendernos”.(*)

Tan grave es la violencia contra la mujer como el silencio que guarda la  mujer violentada luego del hecho, ese silencio se convierte en complicidad y peor aún se convierte en un permiso otorgado para  que en una próxima vez, ella  se deje seguir violentando. Pero ¿ por qué las mujeres  callan esto? , son distintas las respuestas que pueden dar: por vergüenza,  por miedo a su esposo, por no afectar a sus hijos, por no ser mal vista por la sociedad, etc.

Debe dar más vergüenza seguir callando todo ese abuso, que repercute no sólo en ellas si no en su familia (hijos), sin querer acostumbran a sus miembro de la familia que el maltrato, golpes, insultos, etc. tiene que haber si o sí en una familia, y más adelante cuando sus hijos(as) tengan una familia, verán algo normal que su hijo violente o su hija sea la violentado, total eso lo vivieron de niños y nadie hizo nada por cambiar ello. Todo esto se convierte en un círculo vicioso, que si no hace nada en un primer acto de violencia, esto se convertirá en algo insoportable que llevarás por el resto de tu vida.  El problema se cura desde la raíz, no hay paliativos que valgan. Ni silencio, ni olvido, ni perdón.



“ Las mujeres no nos hemos resignado. Todos los días insultamos, gritamos y hasta lloramos de rabia. Pero nada cambia. El acoso es cotidiano y, salvo protegernos con sprays de pimienta o clases de karate, no tenemos mucho más que hacer. … cuando veo a una chica, aterrada, pasando al lado de una turba de escolares que se la comen a groserías, no puedo dejar de pensar que este es un tema muy complejo que ni las leyes ni las líneas de ayuda van resolver, porque insistimos en plantear soluciones para cuando el daño ya está hecho. La gran pregunta es: ¿Cómo convencemos a los hombres de que las mujeres merecemos respeto siempre? ¿Cómo nos adelantamos para evitar el golpe en lugar de curar el ojo morado? “ (*)

Este 25 de Noviembre es el día de la No violencia contra la Mujer, pero sería mejor que próximamente celebremos todos los años la equidad de género, ¿no?

Las víctimas de la violencia a no guardar silencio y a denunciar estos casos llamando a la Línea 100 ó acudiendo al Centro Emergencia Mujer (CEM) más cercano, donde podrán recibir atención y asesoría de forma gratuita., y si  tú conoces a alguien que esta pasando por esto, no seas cómplice  y ayúdala cuanto antes. Juntos acabemos con todo tipo de violencia contra la mujer.

(*) Citas textuales extraídas de la columna de Patricia del Río : “Aquí no pasa nada” Perú21 17/09/11