#ElPerúQueQueremos

Carta de una mamá joven, problemática y soltera

Publicado: 2012-03-21

Pierina Ravizza*

Querida Nia,

Antes de decirte de qué trata esta carta quiero que sepas que tu papá y yo te amamos, lo hicimos cuando escuchamos tus 138 bpm y desde entonces cada día más.

Tu papá y yo hemos discutido qué versión darte y acordamos que la mejor es la original.

Cuando me enteré que ibas a venir tenía 21 años y tú 5 semanas.  Estaba en octavo ciclo de la universidad y todavía vivía en casa de mis abuelos pero eso no me dio miedo, lo que me aterró fue decírselo a tu papá porque no tenía forma de anticipar su reacción.  Nosotros nunca fuimos novios y más que “Romeo y Julieta” fuimos “Una Serie de Eventos Desafortunados” (que si no te lo he leído, tiene un final feliz).

Por ahí vas a oír que un bebé viene cuando dos papis se quieren mucho y deciden ordenar un pequeño, pero que no seas “fruto de un amor” no quiere decir que seas menos amada que uno de esos bebés.

Nuestra relación fue intermitente y problemática, y aunque quiero enseñarte a ser responsable, cuidarte y tomar todas tus decisiones, de nuestra irresponsabilidad y arrebato llegaste tú y de ninguna manera me arrepiento.

Yo le mandé un mensaje de texto y él me buscó al día siguiente. Le enseñé tu foto (en la que no se te veía aún) y asustados decidimos no pensarlo mucho hasta que confirmaras tu presencia. Cuando lo hiciste dos semanas más tarde, tuvimos que hablarlo. Su primera posición fue negarse y optar por lo más sensato, que en ese caso era para mí terminar mi carrera y para él moldear la suya en otro país, sin que nos pudieras acompañar. La conversación duró días hasta que yo me alejé y decidí que completaras tu proceso en mi barriga. Cuando le dije que nosotras estaríamos bien con o sin su ayuda, se emocionó como si le acabaran de curar una enfermedad terminal y me dijo “eso es lo que necesitaba oír”. No porque quisiera que nosotras hagamos nuestra vida sin él, sino porque había adoptado la posición de la razón, haciendo lo “correcto para todos” y mi decisión le dio la seguridad que necesitaba para dejarse llevar por las tripas (como él dice).

Después de eso y un par de experimentos decidimos no estar juntos pero sí ser una familia. También vas a oír por ahí que todos tenemos una media naranja o hay gente destinada a estar junta, nosotros no. Somos como una mala combinación de elementos químicos que al ponerse juntos en una frasco estallan y te dejan con la cara negra y los pelos de punta; pero tu presencia nos ha hecho trabajar en ser mejores y aceptarnos muchas cosas para que puedas tener a tus papis contigo y crecer sin gritos ni conflictos.

Cuando una se imagina que va a ser mami, piensa en la familia feliz y trata de arañar su camino hasta conseguirlo. Yo no pude darte una familia de revista, ni de esas que vienen en los portarretratos pero hago todo lo que puedo para que seas feliz y amor no te falte. Tu papá y yo hemos tenido una historia complicada y muchas veces triste pero pensar en tu bienestar nos ha hecho mejores personas.

También vas a oír por ahí que muchos papis (y mamis también) se van y no ven crecer a sus hijos. A veces es inevitable, otras, es una decisión que algunas personas toman, pero no hacen mejores ni peores a los niños.

Cuando crezcas, probablemente yo te intente enseñar que no hay que hacer muchas cosas: como tomar en exceso, probar drogas o mentir. Pero te mentiría si dijera que tu papá y yo no lo hemos hecho alguna vez. También voy a tratar de enseñarte que tener un bebé es una gran responsabilidad, por eso es mejor tener la opción de elegir el momento indicado y para no hacerte ni hacerle daño a nadie, es bueno que te protejas cuando decidas tener intimidad con alguien. Eso no quiere decir que hayas sido un error, ni que te quiera menos. Hay muchas cosas que no pude hacer, como terminar mi carrera o un plan de maestría que tenía a la mano… poniéndolo en una balanza, tenerte ha sido lo mejor que he hecho y no puedo si quiera pensar cómo sería si hubiera esperado a que llegues más tarde, pero otra vez te digo, como es un gran trabajo espero que puedas decidir cuándo es el momento para que todo se te haga más fácil que a mí.

También vas a aprender que algunas veces las mamás se ponen muy tristes cuando nacen sus bebés. No significa que sean bebés fallados ni que ellas no los quieran. A veces pasa y es porque se desordenan los químicos que tenemos en el cerebro. Yo me puse muy triste después de tu llegada pero al mismo tiempo fui muy feliz. No podía entender por qué estaba tan triste, creía que no era buena para nada y me daba miedo no darte lo que necesitaras. Es normal sentir miedo y es a veces normal que sientas que todo está mal sin razón, solo hay que pedir ayuda y todo pasa.

Lo que te quiero decir, es que tienes una mamá muy problemática: tengo muchas alergias, malas articulaciones, problemas para tener relaciones estables y algunas veces depresión. Pero nada de eso tiene que ver contigo y no permitas que alguna vez te de a entender eso, eres todo lo contrario. Cada día trabajo un poco mis errores para ser yo misma más feliz, que tengas un hogar mejor y te tengo que agradecer que me empujes a hacer esto.

Con amor,

Tu caótica mami.

*Mamacita invitada.

Comunicadora inconclusa, empleada en de-todo-un-poco, reina del drama a tiempo completo y feliz mamá de Nia desde diciembre del 2010.


Escrito por

mamacitas

Cuando uno es mamá o papá aprende a reconocer que no puede sola/o y que necesita el apoyo de muchas personas. Por eso nace MAMACITAS. Para que compartas lo que hiciste para resolver los mil y un retos de la maternidad. Para que cuentes eso que nadie cuenta.


Publicado en