Ideeleradio.- El ministro de Defensa, Alberto Otárola, debe reevaluar seriamente la participación de oficiales de las Fuerzas Armadas en la Escuela de las Américas, porque buena parte de los militares procesados por graves violaciones de derechos humanos en América Latina y en el Perú, tales como el grupo Colina, se han formado en dicho centro, opinó Carlos Rivera, director adjunto del Instituto de Defensa Legal (IDL).

Fue al comentar el anuncio de Otárola Peñaranda, respecto a la participación de oficiales peruanos en la Escuela de las Américas, una organización para la instrucción militar del Ejército de los Estados Unidos. En conferencia de prensa, dijo que esto permitirá intercambiar experiencias en asuntos específicos y "ponerse al día con la modernidad logística" en el marco de la suscripción de un memorándum de entendimiento con el Pentágono.

“Buena parte de los militares procesados por graves violaciones a los derechos humanos en el Perú y en diferentes países de América han tenido como centro de formación y núcleo académico la Escuela de las Américas y, por lo tanto, salvo que haya cambiado de manera radical la perspectiva y la vida de este centro de formación, respecto del enfrentamiento y la lucha contra grupos alzados en armas o insurgentes, no es una iniciativa correcta”, indicó en el programa No Hay Derecho de Ideeleradio.

“Al contrario, creo que el gobierno peruano y, en particular, el Ministerio de Defensa sobre la base de la experiencia y esa información que no es ajena al Ministerio de Defensa porque justamente este ministerio maneja los legajos de todos los oficiales que están procesados por graves violaciones a los derechos humanos”, argumentó.

Rivera Paz recordó que los militares ahora condenados por haber formado parte del destacamento Colina han pasado por la Escuela de las Américas y, por eso, insistió en que esta iniciativa debería ser reevaluada seriamente.

“Tal vez un ejemplo muy concreto podrían ser los oficiales ahora condenados por el destacamento Colina, todos ellos han pasado por la Escuela de las Américas y por eso esa iniciativa creo que debería ser reevaluada seriamente”, aseveró.

Se convirtió en un centro de instrucción de la tortura | Inicio

Recordó que la Escuela para las Américas fue concebida para la lucha contrasubversiva, pero que con el paso de los años se convirtió en uno de los principales centros de instrucción para la tortura y práctica de mecanismos de violación a los derechos humanos.

“Dicho centro de formación nació a iniciativa de los EE.UU. en la década del 50 y 60 y tuvo un objetivo muy concreto formar a los elementos militares de los diferentes ejércitos de la región para la lucha contrasubversiva de aquellos años, pero con el tiempo se fue desarrollando uno de los principales centros de instrucción para la tortura y la práctica de mecanismos de violación a los derechos humanos”, argumentó.

“Eso hasta el propio gobierno de Estados Unidos tuvo que reconocer y hasta donde recuerdo tuvieron una iniciativa de cerrar ese centro de instrucción por el significado y doctrina militar y contrainsurgente que se había desarrollado en esos tiempos”, declaró.

Estimó que la experiencia del Ejército peruano es mucho más rica y aleccionadora en términos del desarrollo tanto político, militar, y doctrinario. Subrayó que esta es una de las milicias que más ha desarrollado elementos de doctrina y estrategia contrainsurgente y los que más aprendieron en el proceso de lucha antiterrorista.

“Por lo tanto, creo yo que más allá del entrenamiento sofisticado que podrían recibir –y que el Perú por cuestiones económicas no puede proporcionar– creo que en términos de formación, de desarrollo doctrinario, el Perú puede mostrar muchos mayores avances y avances significativos en la región. Esto me hace ratificar que no creo que se aprenda mucho de las experiencias que fueron parte de la doctrina y del centro doctrinario de las Escuela de las Américas”, concluyó.