Centenares de delfines y pelícanos siguen apareciendo muertos en las costas del norte peruano sin que pueda determinarse aún la causa exacta de los decesos. El ecologista Heinz Plenge y el presidente de la Asociación de Pescadores de Puerto Eten, Francisco Ñíquen, sostienen que van más de 3 mil delfines muertos en lo que va del año, aunque el Instituto del Mar del Perú (Imarpe) solo ha contabilizado 877.

Además, el representante de la ONG Orca, Carlos Yaipén, dijo a la revista Scientific American que examinó a 20 delfines durante la primera semana de abril y todos tenían los huesos del oído fracturados, además de lesiones en los pulmones y burbujas en la sangre. Este tipo de lesiones habrían sido causadas por las ondas sísmicas emitidas por las embarcaciones que hacen exploración petrolera.

Sin embargo, el vicepresidente de Operaciones de la empresa de hidrocarburos Savia Perú, Rafael Quintero, dijo que  no han hecho exploraciones desde los primeros días del año. “La última exploración sísmica que realizó la empresa fue el 30 de diciembre de 2011, en el Lote Z-48, ubicado entre las costas de las provincias del Santa y de Casma, en Áncash, sin que se reportara ningún tipo de incidente ambiental durante su desarrollo”, aseguró.

En cuanto a los pelícanos encontrados también sin vida en las costas norteñas, el reporte oficial cuenta 538, en diferentes estados de descomposición. Los cuerpos fueron hallados en la playa, sin rastros de haber sido varados por las olas marinas. Gabriel Quijandría, viceministro de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente, dijo la semana pasada refiriéndose al caso, que podría tratarse del morbillivirus -similar al Distemper que sufren los perros- o del virus de Brucella. Afirmó asimismo que en otras ocasiones han ocurrido casos similares en México y Estados Unidos.

Los primeros en notar este fenómenos fueron los pescadores locales, a quienes ahora  les preocupa que si se trata de un virus, este pueda ser trasmitido a los seres humanos. Otra causa probable de este fenómeno podría ser la escasez de alimento debido a la desaparición de la anchoveta. Esta especie es el principal alimento de la cadena alimenticia. Al entibiarse las aguas, la anchoveta huye hacia el sur, hacia aguas frías que corresponden a su hábitat. El Gobierno Peruano ha ordenado una investigación de este caso, que debería arrojar resultados en 10 días.

Información de Terra. Resumen de Sophimanía

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