Los desechos electrónicos pueden representar un peligro para la salud por su alta toxicidad, y en países productores como China representan un riesgo aún mayor. En Guiyu, en la provincia sureña de Guangdong, existe un enorme vertedero de estos desechos, algunos incluso sin haber sido usados y en su empaque original. Así lo corroboró el investigador estadounidense residente en ese país Adán Minter, autor del blog "Chatarra de Shanghai".

Hoy en día la mayoría de los desechos eléctricos y electrónicos no vienen de Occidente sino de Asia y especialmente de la propia China, explicó Minter. El pueblo de Guiyu, compuesto por cuatro pequeñas localidades en el sur de la costa de ese país, se hizo conocido hace una década justamente por ser uno de los lugares donde las viejas computadoras y los dispositivos electrónicos de todo el mundo occidental estaban siendo reciclados.

Esto generó a su vez una nueva industria de reciclaje de productos electrónicos que aprovecha los aparatos que pueden ser reutilizados y revendidos, quema cables para obtener cobre y se vale de baños de ácido para extraer el oro de los microchips. Todas estas actividades representan un peligro para el planeta y los humos tóxicos que despiden afectan directamente a las personas.

En la actualidad el suelo de Guiyu está saturado de metales pesados como plomo, cromo y estaño, por lo que el agua subterránea no se puede beber. El lugar tiene el mayor nivel de dioxinas que causan cáncer en el mundo y los niños tienen un alto porcentaje de envenenamiento por plomo, según la Universidad de Shantou. Los productos nuevos desechados agravan aún más el problema, precisó Minter.

El investigador se puso en contacto con las empresas fabricantes de esos productos, HP, Panasonic y Samsung. Las dos primeras no se pronunciaron al respecto, la tercera negó cualquier participación. "Por supuesto, puede que hayan sido arrojados por alguna empresa local y HP y Samsung no sabían lo que estaba ocurriendo, pero el hecho de que se hayan negado a responder a mis preguntas es raro", dice Minter, que está escribiendo un libro sobre el problema de los desechos electrónicos en todo el mundo.

"La mitad de la basura electrónica que se está procesando en China se genera en China. Mientras los desechos electrónicos de Estados Unidos y Europa están disminuyendo, los que provienen de Tailandia y Malasia están aumentando rápidamente", precisó el autor. Incluso los propios comerciantes se quejan de esto, pues aseguran que los desechos electrónicos de occidente son por lo general de mucha mayor calidad, y por lo tanto mas fáciles de descomponer y revender en el mercado chino de artículos usados.

Información de BBC Mundo. Resumen de Sophimanía

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