A pesar de las declaraciones del jefe de la Oficina de Diálogo y Sostenibilidad, Vladimiro Huaroc, el conflicto por el proyecto minero Cañariaco de la empresa Candente Copper continúa.

El domingo, los comuneros bloquearon las vías de acceso a la zona donde se encuentra ubicado el campamento minero e iniciaron los preparativos para su olla común. Ayer, los manifestantes marcharon en dirección al campamento minero con la intención de presionar a los trabajadores para que abandonen las instalaciones. Según informó lamula.pe, la policía utilizó gases lacrimóngenos para dispersar a unos 400 comuneros que se dirigían a tomar las instalaciones de la minera, sin embargo esto no detuvo  las protestas.

Al respecto, Vladimiro Huaroc afirmó que los manifestantes eran parte de "un grupo reducido y radicalizado". Huaroc resaltó que existe un proceso de diálogo que busca ser saboteado por el dirigente Cristóbal Barrios y los dirigentes de las localidades de Túpac Amaru y San Juan Bautista de Cañaris. Por otro lado, el viceministro de Minas, Guillermo Shinno, fue más allá al denunciar que existen "elementos radicales, ligados al MRTA, desinformando y creando desorden" informó La República.

Por su parte, el dirigente Cristóbal Barrios manifestó que la medida se mantendrá hasta que se haga presente una autoridad del Ejecutivo que pueda dar solución a su demanda acordada en consulta popular en contra del proyecto de la empresa minera, caso contrario la protesta se radicalizará.

Asimismo, se informó que un tramo de la carretera desde el puente San Lorenzo hasta Cañaris fue bloqueado, así como la vía Pucará-Huancapampa-Cañaris. Mientras tanto, el campamento minero sigue con resguardo policial.

Fuente: La República

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