La polémica se desató tras la revelación por parte del exanalista de la CIA, Edward Snowden, de la red de espionaje estadounidense que llegó a afectar a América Latina, con especial foco en Brasil. La consecuencia: una notable tensión entre EEUU y el país sudamericano, que durante los últimos días ha aumentado tras la detención de nueve horas en el aeropuerto de Londres del brasileño David Miranda, quien es pareja de Glenn Greenwald, el periodista del diario The Guardian que publicó los documentos filtrados.

Así, la semana pasada el ministro de Exteriores brasileño, Antonio Patriota, afirmó a su homólogo estadounidense, John Kerry, que ambos países se encuentran ante "un nuevo reto en sus relaciones". Y es que Brasil parece estar en el centro de la cruzada de EEUU por el caso Snowden. Sin embargo, ¿por qué ocurre esto?

Los reportes que el periodista Greenwald publicó en el diario carioca O Globo afirman que durante la última década "personas en tránsito o residentes en Brasil, así como las empresas que operan en el país, se han convertido en blanco de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de los Estados Unidos".

El interés de los norteamericanos en espiar a los brasileños podría deberse a que la potencia sudamericana hospeda unos de los cables de fibra óptica más grandes e importantes del mundo. Y, a través de ellos se transfieren los correos electrónicos, fotos y otra información de muchos de los usuarios de internet en todo el mundo. 

"Aunque no estamos seguros de por qué los EEUU está tan interesado en Brasil, hay sospechas de que tiene que ver con el hecho de que a Brasil llegan varios de cables submarinos más importantes", explica Mike Rispoli, de la organización Privacy International.

Así, el Atlantis-2 es una línea que conecta Sudamérica con Europa y África y fue creada por 25 compañías de telecomunicaciones como parte de la red que configurará la infraestructura de la sociedad global de la información, según indica la consultora de telecomunicaciones brasileña Teleco.

"Estos cables llevan la mayor parte del tráfico de telecomunicaciones del mundo, y las filtraciones de Snowden han demostrado que los gobiernos, tanto de EEUU como de Reino Unido, los están aprovechando para conducir la vigilancia en masa e indiscriminada", sentencia la consultura en BBC. Y es que, según las filtraciones de Snowden, la intercepción de los cables transatlánticos en Brasil es parte de un programa de la NSA, "Fairview", destinado a recolectar información en las redes de otros países.

Con información de BBC

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