Fotografía tomada por Kokemón el 10 de junio de 2006No es un cerro. No. A primer impresión parece. Es una de las más de veinticinco pirámides del maravilloso complejo arqueológico de Túcume.Mi curiosidad infantil había sido saciada en las páginas de una enciclopedia de historia prehispánica cuando tenía 10 años. La imagen la miraba una y otra vez sobre el papel satinado a color.Ahora estaba frente a ella, inmensa y monumental.Había un pésimo cielo para ser lambayecano, pero igual la imagen intimida al mortal y la fotografié.Una y otra vez, sabiendo que el cielo lavado y cubierto no era el mejor aliado para un contraste digno de publicidad turística.Pero ahora yo estaba allí, me tocaba mi turno, no estaba pasando hojas impresas a color, era ahora mi retina la que parpadeaba de emoción.Ahora, al frente de la mole de barro sudaba frío.Soplaba el viento en mi cara y el mosquito tercamente intentaba picarme una y otra vez.No es un cerro. No. Pero parece. Engaña, miente, huevea.Sólo sé que dentro de él, está el mausoleo de algún dignatario Lambayeque, esperando develar sus misterios.