Zombies en la historia del Perú. La llegada de los españoles (2).
Como ya adelantamos en varios posts, el Imperio Incaico vio en los zombies un medio de dominación de otras culturas andinas. Este sistema, que era en extremo efectivo, pero a la vez demasiado peligroso, tuvo duros críticos incluso dentro del mismo Incanato. Quizás el más relevante para nuestra historia sea Titu Kusi Huallpa, también conocido como Cahuide.
Pero no nos adelantemos. Desde su fundación, el Imperio Incaido había usado a los muertos vivientes intensivamente. Esto, que había representado la caída de algunas culturas anteriores, era visto como una amenaza irresponsable por miembros de algunas de las panakas reales incaicas. No obstante, dado que en el uso de los zombies residía el verdadero poderío militar de esta fuerza conquistadora, era difícil cualquier clase de medida que pusiera en peligro la posición de dominio que tenían los incas en los andes.
Los líderes políticos y militares que realmente gobernaban durante el periodo de Pachacutec fueron quizás los que mejor entendieron este fenómeno. No solamente fueron los que usaron a los zombies más intensivamente, expandiendo el imperio incaico más que cualquiera de sus predecesores, sino que además fueron los que comenzaron a tomar medidas de precaución en el caso de que se perdiese el control de las huestes de cadáveres reanimados. Una de las medidas que se tomaron, por ejemplo, fue el inicio de la construcción de la fortaleza de Sacsayhuaman en el siglo XV.
A la población en general se le presentó como un templo o "emplazamiento ceremonial" de adoración al sol. Su curiosa posición se justificó como el mejor lugar cercano a la ciudad de Cusco en donde hacer los rituales necesarios. No obstante, la elite incaica sabía desde el comienzo la verdad detrás de la construcción de Sacsayhuamán.
Es un hecho muy poco conocido que el Inca Garcilaso de la Vega le dedicó un tomo completo de los Comentarios Reales a las técnicas que usaban sus antepasados para controlar a los zombies. A este escrito se le llama comunmente los Comentarios Perdidos. Se cree que en el Instituto Oro Tech hay una copia restaurada.
Se trataba del último lugar de defensa en caso que se perdiese el control de los zombies almacenados. Lo que le preocupaba a algunos de los dirigentes era que bastaba que un zombie se escapase y mordiese a un campesino para que se iniciase una epidemia similar a la que había traído abajo a culturas anteriores. Así que astutamente diseñaron lugares como Sacsayhuamán en los cuales enclaustrarse si es que la población de la ciudad de Cusco se perdía ante un caso extremo de zombismo.
Si se toman un momento para reflexionarlo se darán cuenta de que todo tiene sentido. Primero, se encuentra en lo más alto de un cerro, lo que da tiempo suficiente a los sobrevivientes de prepararse. Después de todo, está a dos kilómetros de la ciudad. Éste es un detalle importante, porque como todo buen zombie survivalist sabe, cada segundo adicional que uno tenga para prepararse es crucial.
Segundo, las gruesas paredes de piedra impiden que los muertos vivientes puedan ingresar tumbánd0las. Gracias a la inteligente técnica de construcción, obviamente desarrollada específicamente para este fin, los sobrevivientes podían seguir adentro con la plena tranquilidad de que los zeds no podrían ingresar.
Tercero, las piedras son lisas, lo que asegura que los muertos vivientes no pudiesen trepar y meterse. De hecho, por esta razón era que el plan de los diseñadores de Sacsayhuaman en ningún momento fuese atacarlos desde adentro y matarlos afuera, pues eso implicaría que los cuerpos inertes de los zombies neutralizados se acumulasen junto a las paredes, lo que podría terminar en una especie de rampa para que los demás zeds se metiesen. El plan definitivamente era otro, el cual se ha perdido en la historia. Pero estamos seguros de que en los Comentarios Perdidos se encuentran descritos.
El inteligente diseño de la parte exterior de la fortaleza esconde las puertas de acceso a los ojos no entrenados.
Cuarto -y quizás más importante-, las puertas. Es imposible hacer una fortaleza sin puertas de acceso y de salida. Como cualquier turista podrá comprobar fácilmente, las puertas de acceso a la fortaleza se encuentras escondidas visualmente. Si uno se para en la planicie y las busca con la mirada, no las encontrará fácilmente, pues se pierden en el diseño dentado.
Quinto, el olor podía representar un problema, pues algunos zeds se dejan guiar por él cuando salen a cazar. Por ello el diseño de la fortaleza contenía gruesos pasillos y techos altos, de tal manera que se asegurasen de que corriese una corriente de aire que se llevase los olores hacia el precipicio que se tiene en dirección a la ciudad.
Sexto, las puertas de acceso eran cerradas con pesadas piedras. Pero de ser éstas abiertas por la fuerza conjunta de una horda de zeds, se les esperaba al otro lado con armas listas. Para que el número de la horda muerta no representase un factor determinante fue que se diseñaron las puertas angostas. De esa manera los defensores podían eliminar a un zombie a la vez y arrojarlo al precipicio. Cualquiera que haya visto la película 300 sabe cómo funciona esta estrategia.
Las puertas de acceso no solamente eran angostas, sino que estaban elevadas, lo que permitía una mejor defensa, dado que es bien conocido que los muertos vivientes tienen problemas para subir escaleras.
Sétimo, la fortaleza misma tiene varios niveles. Como se puede apreciar en todas las estampitas que muestran a Sacsayhuaman, ésta cuenta con varios niveles de acceso. Esto no es casualidad, ni se incluyó porque se ve bonito. Es un elemento bastante inteligente, pues permite organizar varios niveles de defensa. Si por alguna razón los zeds lograban ingresar a la fortaleza, lo harían apenas al primer nivel, lo que permitía a los sobrevivientes posicionarse en el segundo y continuar con la defensa.
Octavo, si todo esto fallaba, los inteligentes arquitectos incluyeron una ruta de escape secreta. No es ningún misterio para los cusqueños que existe un túnel subterráneo que conecta a Sacsayhuamán con otras obras de ingeniería inca, como el Qoricancha. Estos túneles fueron construídos para que las elites pudiesen huir en el caso de que se perdiese el control de la mano de obra barata (y muerta).
Esta maravillosa obra de ingeniería anti-zombie fue iniciada por las mujeres que gobernaban realmente durante el periodo de Pachacutec, pero terminada durante el periodo de Huayna Capac casi un siglo después. No obstante, como todo plan que parece infalible, éste tenía un problema crucial que hizo que toda la organización se viniese abajo. En un post siguiente hablaremos de eso y de cómo Cahuide pudo salvar a muchos. Algunos dirían que incluso a la humanidad entera.