Ancón: De vuelta a la República Aristocrática.
Se repite todos los años. Una zona para residentes y otra para “visitantes”. Una cuerda que va del malecón hacia el mar separa las dos zonas del lado de la playa, mientras que un contingente de matones impide el transito del lado del asfalto. Ancón, antaño el balneario más exclusivo de Lima, deja ver su más lamentable rostro cada fin de semana en que los bañistas acuden a pasar un rato de sol y distensión. Gracias al reportero urbano “eduardorpv” podemos escuchar la historia desde la perspectiva de los protagonistas.
ZONA DE RESIDENTES
Esta norma que parece ser un mal recuerdo de los tiempos de la república aristocrática fue reportado por el usuario “eduardorpv” en su cuenta de Youtube. Entre carteles que señalan los límites de cada zona, el reportero intentó transitar sin éxito por la zona prohibida del malecón. Y aunque pedía explicaciones al hecho, todo recababa en argumentos circulares y explicaciones que pasaban por comisarías y ordenanzas municipales en teoría impedidas de realizar acciones como permitir la segregación de una playa.
La policía tampoco se inmuta. A pesar de que constitucionalmente la segregación y el impedimento del tránsito estén prohibidos, la policía no se inmuta y permite esta realidad ante sus ojos. A pesar de los pedidos del reportero por hacer cumplir la ley, la policía apostada en la playa solo respondió con titubeos.
Vale la pena también mencionar las declaraciones del alcalde de Ancón, Pedro Barrera Bernuy, en entrevista para el Diario 16: “No hemos sacado ni sacaremos ningún tipo de ordenanza que avale la exclusividad de las playas y menos la discriminación, porque ese tipo de privilegios equivale a segregación racial, que solo la exige un grupo de ‘pituquitos’ con deformación cerebral, como en este caso”.
LA GENTE ES UNA MUGRE
Esa fue la opinión de uno de los residentes de ancón al ser increpado por el hecho. Sus argumentos para justificar sus acciones es que la gente que viene a pasar el día deja muy sucia la playa. Para ellos la situación no es una cuestión de racismo o segregación. Una negativa rotunda. “No es racismo, es educación”. Cuestión de aforo también. “No puedes sobrecolmar una playa, es un tema ambiental”. Lo lógico, para ellos, es que defensa civil intervenga para limitar la capacidad de la playa.