En el debate realizado entre los candidatos republicanos a la presidencia de los Estados Unidos, todos los dardos estuvieron dirigidos a Mitt Romney, el favorito según las encuestas.

Los otros cuatro candidatos hicieron referencia a temas como que Romney tendría que responder por su pasado en la compañía Bain Capital en donde habría despedido varias personas, tal como se afirmó en el documental difundido por un grupo que apoya al candidato Newt Gingrich.

Otro de los temas polémicos son los impuestos que paga Romney por sus multimillonarios ingresos. Elmundo.es afirmó que al candidato no le ha gustado revelar sus datos de declaración de renta, y durante el debate sus contrincantes aprovecharon para resaltar que, según eso, tiene cosas que esconder.

El candidato afirmó que pensaba revelar sus impuestos en el mes de abril. Además reveló que las autoridades se quedan aproximadamente con un 15% de sus ingresos anuales, los cuales ascienden a 200 millones de euros.

Para Gingrich se deben declarar los impuestos antes de las votaciones de Carolina del Sur, que serán el próximo sábado para elegir el candidato republicano. Sin embargo, la legislación exige hacer una declaración de patrimonio, pero no una de renta.