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Music Lover: Alberto Menacho

Publicado: 2013-03-28

Alberto Menacho se ha vuelto una de las personas más influyentes en la escena de conciertos en el Perú. Se hizo conocido por traer algunos de los shows más grandes a la capital, como Depeche Mode, Megadeth y Kiss, pero lleva desde 2005 promoviendo conciertos de corte clásico con TQ Producciones. Hace un par de semanas sorprendió a medio Lima al anunciar una serie de shows que incluyen a varios artistas bombazo, de esos que todos morimos por ver. En el cartel están el legendario tecladista de jazz Herbie Hancock, el influyente minimalista Phillip Glass y el reconocido pianista Lang Lang. Hoy nos habla de su experiencia, de lo que ha aprendido en el negocio y de esa pasión inquebrantable que tiene por la música.

Escribe: Rafael Gutiérrez

Foto: Rochi León

Nos sentamos con Alberto en su oficina en un piso alto de un edificio en Miraflores. Las paredes están cubiertas de pósters de música clásica, pases de backstage y carteles de espectáculos por venir. Allí se siente cómodo, se explaya, es el lugar preciso para jalarle la lengua y que nos cuente de sus conciertos favoritos, de su lucha por el reconocimiento del rock peruano dentro del país y de aquel pedido extraño que le hizo Axl Rose cuando vino a tocar al Perú.

Estudiaste arquitectura, ¿cómo diste el salto al mundo de la música?

El mundo de la música siempre estuvo muy cerca porque mi madre es una gran pianista peruana: Teresa Quesada. Viví fuera mucho tiempo y cuando regresé se me ocurrió traer a artistas clásicos por un gusto personal. En esa época no había tantos conciertos, así que lo tomé como una especie de hobby, una idea media loca, pero luego se convirtió en algo más grande que tuvo la aceptación del público.

¿Cuáles fueron los primeros conciertos que organizaste y te impactaron?

Desde el primero. Trajimos una pianista rusa que se llama Olga Kern en mayo del 2005. Ella acababa de ganar un concurso en Estados Unidos y era una estrella mundial, aparte de ser una mujer muy guapa. Fue impresionante verla. El teatro estaba lleno. De la gente del rock, el primero que hicimos fue Megadeth, alucinante por la fuerza que tienen esos locos. Nos hicimos muy amigos con Mustaine… con todos.  Tanto así que los volvimos a traer y fue muy bueno. Siempre vamos por grupos que estén compuestos por buenos músicos, buenos artistas. Gente como Joe Satriani, Megadeth, Depeche Mode o Moby. Es gente que dejando el gusto personal a un lado, desde un punto de vista objetivo, es buena. Quizá el más impresionante que hayamos hecho entre los conciertos de rock fue Kiss: era Disneylandia en el escenario.

¿Alguna estrella de rock ha hecho algún pedido raro, como suele pasar en las películas?

La mayoría de gente que hemos traído son grandes músicos y están preocupados más por el concierto en sí, por su música, por el sonido y el show que van a poner. Hemos tenido pedidos más relacionados a la parte técnica, cuestiones de sonido. También el tema de transporte y de hoteles. Los artistas quieren estar cómodos, lo que es entendible. No hemos tenido pedidos raros, salvo Axl Rose que me pidió una naranja triangular, pero ya todo el mundo conoce cómo es Axl. Sin comentarios (risas).

En la actualidad, en Lima, hay muchos más conciertos de bandas internacionales que hace unos años. ¿Cómo crees que esto ha cambiado la cultura de la ciudad?

Creo que es buenísimo para la ciudad y la sociedad. Hay que traer a grandes artistas, de cualquier género, pero que sean grandes. Eso es lo que me interesa. Me gusta la música clásica y el rock, pero hemos traído gente de new wave y electrónica, como Moby, un ser humano muy especial. En cuanto a música clásica hemos traído también a gente creo que bastante buena. Ahora se viene Phillip Glass y Herbie Hancock. Lo que hemos hecho un poco es variar la temporada clásica. Me pareció interesante meterle algo de jazz, flamenco y teatro.

Dentro de la gente que escucha música clásica, ¿cuál es la audiencia que se está formando en Lima?

Tengo mucho gusto de reportar que la audiencia es absolutamente horizontal, más que vertical. Va gente de 15 a 80 años y de todos los caminos de la vida. Es alucinante porque tenemos desde precios altos hasta S/. 30. Creo que somos los primeros en menospreciar el conocimiento que tiene la gente peruana sobre la cultura. Hay una idea preconcebida: si te gusta la música clásica eres muy culto o eres una señora de 80 años. No compadre, sorry: no es así. Eso me parece abominable. El peruano tiene mucha cultura musical. Las comunicaciones ya no pueden meterle el dedo a la gente. Tengo correos que me llegan desde sitios que ni te imaginas. Del interior del país, gente comenta sobre las bandas que traemos, y no solamente sobre Guns n’ Roses, sino sobre Yo Yo Ma, Baryshnikov, sobre Kiri Te Kanawa, etcétera. Hay gente que conoce.

¿Crees que internet ha influenciado en que la gente expanda su cultura musical?

Pero por supuesto. Eso tiene que cambiar las expectativas de la gente sobre el tipo de conciertos que se realizan. Creo que es muy importante si queremos elevar el nivel cultural. Esto tiene que cambiar de alguna manera. Los medios tienen mucho que ver también, la radio, la televisión, la prensa, todos. El gran porcentaje de la música que se pasa en las radios no es muy bueno, es comercial y atrae auspiciadores, pero creo que está matando la buena música y el buen nivel del arte. Sin embargo, hay un grupo de resistencia que sí conoce esto y nos reunimos para hablar del tema. Tienen que haber más espacios, no es que se quite todo lo otro, pero que haya una democracia. Una democracia en la cultura.

Hay una movida creciente que busca que pongan más rock peruano en las radios.

Sí. Es que es increíble. Aquí no solo tenemos conocedores del rock, sino que hay bandas espectaculares, que ganan premios en todos lados y en el Perú… no pasa nada. No puede ser que al músico peruano no se le pague una cantidad importante por presentarse o que las condiciones que se le brinden no sean iguales a las de los artistas internacionales. Por ejemplo Frágil, que para mí es la mejor banda de progresivo sudamericano, ¿por qué no la escucho en la radio? ¿Qué pasa con Emergency Blanket? Es un bandón que debería estar en la radio todo el tiempo, y así hay tantos más. ¿Y Mauser y Arsenal? Quiero meterme de lleno a ese tema, sobre todo si se quiere que siga la escena, tiene que haber participación de todos: la prensa, la radio, la televisión. La cultura es una de las patas más importantes de la mesa que es la sociedad y no le estamos prestando la atención que deberíamos.

Si pudieses traer a tocar un músico, vivo o muerto ¿cuál sería?

¿Sabes qué es lo que pasa? Si contesto esa pregunta mañana mismo sale: “Alberto Menacho va a traer a tal artista”. Me ha pasado.

Escoge un artista muerto, entonces.

(Risas) Uno muerto, a ver… Jimi Hendrix con Bach.


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Revista Vela Verde

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