En España desarrollan el “carro volador”
Muchas veces, en medio del tráfico típico de toda ciudad, usted debe haber deseado que su auto se eleve por encima de los otros y lo lleve a su destino en la menor cantidad de tiempo. Y ha sido despertado de aquél anhelo por el ruido de los motores y los bocinazos de los demás autos, volviéndolo rápidamente a la triste realidad. Pues no será por mucho más tiempo.
Carlos Matilla , un ingeniero mexicano radicado en España, ha creado el Helikar, un auto volador que despega y aterriza en forma vertical, y se puede desplazar hasta a 430Km/h. “Puedes estacionarlo en la puerta de tu casa”, dice Matilla, “y desde allí desplazarte a cualquier punto de manera rápida y segura".
Pesa 700 kilos y sus creadores han incluido un “piloto automático” de apoyo para los conductores en caso de emergencia. Además, en caso de accidente en el aire, un paracaídas hará que el auto caiga suavemente, sin riesgo para la vida de los ocupantes. Se alimenta con el mismo combustible que usa un jet convencional.
Inspirado en la película Blade Runner, tal vez la que más ha influido en los ingenieros del HeliKar, el auto volador español comenzó a plasmarse en los planos hace cuatro años. Luego, junto con el también ingeniero José Joaquín Vila, crearon la empresa FuVex (Future Vehicles and Entrepreneurs), encargada del diseño y la mecánica del CARRO volador con capacidad para dos ocupantes y 40 kilos de equipaje.
Se necesita $2.000,000 (Aproximadamente € 1.500,000) para que el prototipo de auto volador arranque. Si los plazos se cumplen, la presentación mundial en el París Air Show se haría dentro de año y medio. “No podemos permitir que Israel y Estados Unidos se nos adelanten”, dice Matilla, también autor del primer autogiro no tripulado del mundo.
“Hemos estudiado dos posibles formas de sacar adelante este proyecto”, resume Carlos Matilla. “Fabricar y comercializar el HeliKar en solitario o vender el desarrollo a otra empresa. Este tipo de vehículos no ha sido aún explotado. Empresas israelitas y americanas han fracasado, y sabemos por qué, de modo que el que primero fabrique el automovil volador se llevará el gato al agua”. O, dicho de otro modo, el cielo de las ciudades.
“Cualquiera podrá manejarlo. Bastarán algunos conocimientos extra que los requeridos para tener el carné de conducir”. Y a un precio de $35,000 (€250.000) el básico y $1.200,000 ($900,000) la versión de lujo, mucho menor que el de otros transportes, finalizó Matilla.
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Redacción de Paul Moreno para Sophimanía.
Fuente: El Mundo
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Del griego Sophia: Sabiduría. Sophimanía es esa 'manía'. esa 'enfermedad' tan humana por saber, descubrir, entender, construir, explorar.
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Del griego Sophia: Sabiduría. Sophimanía es esa 'manía'. esa 'enfermedad' tan humana por saber, descubrir, entender, construir, explorar.