El último fin de semana, medios locales anunciaron que el libro de Lurgio Gavilán, Memorias de un soldado desconocido (2012), iba a convertirse en una película y que sería Lucho Llosa el encargado del proyecto. Pero esta no era la única novedad. También se indicó que la adaptación del guión estaría a cargo del novelista Mario Vargas Llosa.
Al respecto, la historiadora Cecilia Méndez, docente peruana de la Universidad de California Santa Bárbara, ha hecho pública a través de su página personal en Facebook su extrañeza y —¿por qué no decirlo?— descontento, pues considera que Vargas Llosa no viene a ser la persona adecuada: antes que por una cuestión de capacidades, por un asunto ideológico.
Méndez hace referencia en su declaración a un artículo escrito hace poco por el Premio Nobel sobre la ciudad de Cusco, en el que el narrador apuntó: "Siempre que he venido al Cusco he peregrinado hasta la casa del Inca Garcilaso, el primero en reivindicar sus ancestros indios y españoles y en llamarse a sí mismo 'un peruano'". La observación, aparentemente inconexa con el tema, toma sentido cuando se tiene en cuenta que en mayo de 2013, en una conversación sostenida con el IDL, la historiadora señaló: "Desde Garcilaso, el mestizaje ha sido una cortina para defender una identidad hispanista. Acá el mestizaje es el status quo, es esconder el racismo". Y si a esto se le agrega la innegable inclinación de Vargas Llosa por distinguir lo andino de lo occidental, como bien apunta Méndez, la suspicacia de la historiadora resulta mucho más comprensible.
Sin embargo, hay algo cierto: Gavilán tiene toda la potestad de elegir con quién llevar a cabo este proyecto. Y Vargas Llosa mostró su interés en él desde un principio, ya que comentó el libro apenas salió publicado.
Méndez entiende a Gavilán ("Les deseo bien a los Vargas Llosa, y todo sea por la buena causa que Lurgio Gavilán ha querido impulsar con ese magnífico libro"), aunque no deja de recalcar su posición ("espero vivir para que exista otra versión en pantalla grande de un libro que sin duda se merece lo mejor").
A continuación, las palabras de Cecilia Méndez:
¿Sólo a mí me cae como un baldazo de agua fría que MVLL sea el elegido para escribir el guión de la película basada en las 'Memorias de un Soldado Desconocido', de Lurgio Gavilán, que Lucho Llosa se prepara a rodar? El Vargas Llosa del Informe de Uchuraccay, el mismo de la 'Historia de Mayta', el de 'El Hablador', el de 'La Utopía Arcaica'... Aquél de las anteojeras dicotómicas: civilización/barbarie, occidental/andino, superior/inferior, Europa o nada, neoliberalismo o atraso (no hablemos del macartismo). El mismo que hace poco escribía una columna sobre el Cuzco que parecía sacada de un diario de viajero europeo decimonónico en un país exótico, con mezcla de indigenismo trasnochado ("indiecita") y nostalgia hispanista de Garcilaso. Estas son las cosas que pasan en mi país, habiendo tanto talento cinematográfico. Será, así, irónicamente un intelectual que siente a su propio país como exótico que escribirá el guión de la historia de un joven campesino en uno de los momentos más devastadores de nuestra historia. Espero equivocarme, pero la gente no cambia así nomás a los 80 años. Les deseo bien a los Vargas Llosa, y todo sea por la buena causa que Lurgio Gavilán ha querido impulsar con ese magnífico libro. Y aún si la película me sorprende por no ser mala, espero vivir para que exista otra versión en pantalla grande de un libro que sin duda se merece lo mejor. Y no más de lo mismo.