Roció Cerón D.F. México 1972

Foto: Vanessa MARtínez r.


Hace unos días tuve la oportunidad de asistir a una de las performances poéticas, podría decir más experimental y destacada de nuestra escena de la poesía latinoamericana actual.

La instalación sonora estuvo a cargo de Mario Del Rio Escobedo y Rocío Cerón, en movimiento la bailarina Denisse Cárdenas, la pieza sonora accionada en vivo con música de Ballesteros Lara Daniel, los poemas y voz de la autora.

Nudo Vortex es también un libro, publicado por Proyecto Literal-Colección Instante Fecundo (México, 2015).

La poética de Rocío Cerón está gozando de un excelente momento de reconocimiento internacional, ya que acaba de ganar el premio de traducción más importante al inglés, el Best Translated Book Award 2015, con su libro Diorama. La traducción estuvo a cargo de Anna Rosenwong (Phoneme Media, 2014).


Sobre el libro Nudo Vortex

foto: Vanessa martínez r.


Desmembrar el objeto en lenguaje hirviente


                                                                                          Nudos que no dicen nada

                                                                                          Y nudos que todo lo dicen 

                                                                                          Jorge Eduardo Eielson


Haber ingresado al hoyo negro, haber encontrado todas nuestras memorias, y como en una suerte de animalario haber intentado ponerle la cabeza de león a un ratón, mientras ladra un discurso político, no tan lejos de nuestra realidad, si decidimos renombrar las cosas por lo que son, con nuestros actuales valores.

Por lo tanto se realizan ejercicios de retención y expulsión, nada más intenso para un atento lector de poesía, en esta suerte de calcos semánticos donde la autora es la voz fly hostess que nos invita ir detrás del cuerpo y su palabra.

Los elementos naturales han ingresado al vortex y se están anudando e intentando subsistir a sus formas, la transposición de su cosmovisión y las nuevas simbologías en este universo ceroniano, son la repetición sonora que se entreabre a nuestros ojos y oídos, himnos sobre un nuevo orden sensitivo.

Los poemas son samplers de nuestra mentira narcótica, y nos muestran la belleza de la enfermedad, como diría el poeta Cesar Vallejo: El bien de ser dolernos doblemente, la desfibración carnívora, sobre un tiempo que no llegamos a amar.

Roció Cerón en trance pitonizante nos alquimiza en su lenguaje, nos reza todo Fluxus en Nudo Vortex el pre contenido de la caja negra de la tierra.


Tres preguntas a la autora

Foto: vanessa martínez R.



1- ¿Pensaste cuando escribiste Nudo Vortex, en todos los fines multidisciplinarios en los que se iba desarrollar?

Nudo Vortex se fue escribiendo de forma procesual, me interesaba la testificación de la escritura a partir de las lecturas en voz alta y acciones poéticas: el público, sus recuerdos, el contacto con él, fue una energía que está dentro del poema. Fue una escritura procesual, de construcción, autodestrucción y reconstrucción poética.


2- ¿Podrías explicarnos el proceso evolutivo de tu proyecto Nudo Vortex?

Escritura en siete ediciones, un libro con siete poemas que revela un mundo profundamente contemporáneo, lleno de urbe, del sonido del tiempo que nos ha tocado vivir y, a la vez, profundamente personal. El proceso fue escribir desde lo interior escuchando con atención el mundo que me rodea.


3- ¿Sobre la percepción de lo contemporáneo, cuál ha venido siendo la estimulación más transgresora que activa tus momentos creativos en la actualidad?

La risa, el cuerpo y el sexo.


POEMA

foto: vanessa martínez r.